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Cuenta

Cuenta, que me extraña cuando el sol se oculta entre el ocaso del día. En esas noches solitarias de silencio, en ese encuentro formal entre el yo y la soledad del tu.

Cuenta, que recuerda el dulce sabor del amor, al diluir mi nombre en tus letras, tus versos, tu pluma. Dime, que al recoedarme tiene la certeza de contemplar el cielo estrellado conmigo.

Cuenta, que mis versos son ligeros, libres, sutiles y sensibles, al escribir de lo mucho que le amo. Cuento, que usted es,el oasis de mi desierto, y la rosa de mi primavera.

Cuento que yo, escribo versos, tú escribe prosa. ¿Qué cuenta tu corazón? El mio cuenta detalles, sonrisas, poemas, tristezas, alegrías. ¿Qué cuenta tú?

Poetisa, Eduviges Guerrero Rijo. República Dominicana.

Soledad es una señora

Soledad es una señora que transita solitaria, es errante y bagabunda, que camina sin rumbo por los rincones del alma, se sienta en la casa del rico y del pobre, es descarada donde fija su mirada, ella nunca viene sola siempre está acompañada.

Cargada de tristezas, cargada de dolor, golpea tu orgullo y te quiebra el corazón, soledad parece tener buena intención, cuando ella te dice todo estará mejor,pero cuando cuando cae el ocaso y se va la emoción, ahí, aparece soledad, para recordarte que está solo en ese casón.

Pareciera que está bien, viviendo con soledad, hasta que una noche cualquiera te hace falta el amor y te das cuenta que es mejor, vivir con el Señor amor, él, está lleno de calidez y candor y que con el en casa la vida tiene emoción.

Adiós soledad, adiós sin regreso, hoy te cambiaré por amor excelso, tomaré tu nombre y construiré nuevos versos, seré libre olvidando el dolor, pondré música a éste olvidado corazón y le daré serenatas con güira y acordeón.

Poetisa, Eduviges Guerrero Rijo. República Dominicana

Fingiendo

Fingiendo que no te amo, me he pasado la vida, cuando está cerca mi corazón canta y cuando está lejos mi corazón te extraña. Es una sensación entre locura y poesía que siente el alma mia sintiendo que está lejos y amando en la cercanía.

Finge no escuchar lo que dice el corazón, es un delirio entre el amor y la razón, finge que es sol, pero sabes que es luna. Finge que no sabe que solo de noche brillan las estrellas, que ellas son testigos de lo que sigue después.

Finge el agua derramada como lluvia, que detrás de sus nubes oscuras, ya no hay más días claros, finge que ya no existe otra firmamento cuando veo el arcoíris que me invita a otra ronda para amar.

Finge que no quiere, finge que no es verdad, finge ser ave solitaria que vuela en libertad, finge que no es verdad que el amor tiene otra cara que se llama libertad.

Poetisa, Eduviges Guerrero Rijo.