Se escucha el silencio, la pausa del afán, todos duermen, se vuelve dulce el aire que respira, la noche con su encanto te invita a disfrutar.
Escucho la lluvia caer, mi corazón palpita en aquel mutismo, en ese secreto que guarda la noche, complicidad que evoca el firmamento .
Sigilo que murmura la noche, miradas silentes que se pierden entre el ocaso y la aurora. Esas reservas de palabras que se escuchan estruendosas al invocar el silencio.
Poetisa, Eduviges Guerrero Rijo
Muy bello y sentido, Eduviges. Me da gusto saber que continúas inspirándote. ¿Qué hablará ese silencio? Muy hermoso.
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