Hoy, le pedí a las aves sus alas para volar libre y sin prisa, para subir hasta donde guarda lo que piensa, lo que calla y lo que ama.
Hoy, amaré sin mañana y sin pedir permiso, Hoy que la lluvia acaricia el viento y el mar se inclina ante el cielo.
Amaré hoy que veo tus ojos el que se escapa una mirada tras el filtro del alma, Te amaré hoy que sé que no hay mañana, te amaré hoy y ahora que es un instante antes que llegue el ocaso.
Eduviges Guerrero Rijo
Maravilhosa!
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Gracias
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Bello poema, Eduviges. Magnífico. Me gustó mucho. Felicidades.
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Gracias Santi
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Saludos, Eduviges.
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